P.
Pachá.
Lo mismo que bajá.
Pagoda cast., cat. y val. pagode port.
Del pers. butkedeh o putkudéh, “templo de ídolos,” voz
compuesta de but (Buda) o put y “ídolo” y de kedéh
o kudeh, “casa.” Marcel Devic.
Papagayo cast.,
papagaio port., papagall cat. y val., papagay cat. Del ár. babagá,
pers. bapgá, “el papagayo, ave de las Indias.” Defrémery.
https://es.wikipedia.org/wiki/Psittacoidea
Paparaz, paparraz port. Lo mismo que abarraz.
Paraíso.
Del lat. paradisus, del gr. *, hebr. fareddes, “hortus,
arboretum.” El origen de esta voz no ha de buscarse entre los
griegos ni entre los hebreos, sino en las lenguas del Asia Oriental.
Cf. pers. * “hortus in quo solo omnia, quae in omnibus aliis
hortis crescunt, reperiri possunt, paradisus aut hortus in
paradiso,” sánscrito paradeça
“regio aliena, dein eximia.” La voz árabe firdaus procede
de la forma persa.
Parao cast. y port., parau port.
Embarcación grande filipina. Del malayo * (* de tres puntos) praho o
práo. Marcel Devic.
Parasanga. V. farasanga.
Parsi.
Adorador del fuego. Del pers. * (* de tres puntos) parsí, “persa,”
adj. de bárs, “la Persia.” Marcel Devic.
Pasamaque.
Borceguíes amarillos, anaranjados o de otros colores. Haedo, Topogr.
de Argel, fol. 20 col. 2.a Peregrina corrupción de tamác, “botas
árabes” en Hélot, que bajo la forma iltimác se encuentra en
P. de Alcalá con la acepción de “borceguí,” y bajo la de
tumác en Aben Batuta (II, 127), en Berggren y Cherbonneau. Esta voz
que no se registra en los dic. del ár. clásico, la trae Dozy del
turc. tumác. V. Dict. des noms des vétem., p. 49. “… porque
todos los levantes y genízaros que en ella venían, tuvieron por
cierto que les habian de embestir dentro del mismo puerto, y tenian á
punto su ropa y pasamaques, que son sus zapatos, para huirse luego
por tierra sin ser combatidos.” Cervantes, D. Quijote, 1.a
Part., Cap. XXXIX, III, p. 159.
Pascua. Del lat. pascha,
transcripción del hebr. fesahh, “sacrificium ob immunitatem
populi oblatum, agnus paschalis.” (cordero pascual)
V. Gesenius.
Pataca cast., cat. y port. De ba tâca
por abú tâca, lit. “el
padre de la ventana.” Müller. Los moros han tomado las columnas
de Hércules, que se encuentran acuñadas en la moneda, por una
ventana, y de aquí el nombre de bataca que dan a las mismas.
Dozy.
Patache, patax cast., patacho, pataxo port. De batách,
“navis belica.” Como el vocablo aráb. no se registra en
los dic. clásicos, cree Dozy encontrar su origen en la bastasia
de los Dálmatas, citada por Ducange. Cf. albatoza.
Patán.
El aldeano o rústico. Fig. y fam. Hombre zafio y tosco. Acaso de
batt, que se registra en Bocthor con la acepción de “idiota.”
Pateca port. Melón. De batíja, que vale lo mismo.
Pateo
port. Según Sousa, de batha, “terreno deprimido.” (vado,
badén)
Pato. Sousa, Defrémery y Müller, a quienes
siguen Dozy y la Acad., traen esta dicción de la ár. batt, mojor
del n. de unidad batta, “pata, ánade doméstica” en P. de
Alcalá, “anas, anser” en R. Martín, “ánade, pato”
en el P. Bernardino González. Encuéntrase esta voz como clásica en
Lane con la doble acepción de “ánsar y ánade,” aunque
generalmente vale la primera de estas aves, pues los árabes aplican
* al pequeño ánsar y * al grande, como se lee en el siguiente
pasaje del Tratado de las palabras ajemies introducidas en la lengua
árabe por Abú Mansur Mauhub ben Ahmed el Chawaliquí (Cod.
Escurial., 1124): *: Dice Abu Becr: El pato: el nombre de esta
ave no es ár. puro; y * entre los árabes designa el pequeño, y el
grande se llama * (ganso).
Pato. Borrón. De batta, “pato,
gota de tinta sobre el papel” en el P. Bernardino González y en
Bocthor.
Pelote. Y. polote. “Un pelote colorado y azul.”
Embargo de bienes de Andrés Azibache, de Pataura, Arch. de la
Alhambra, leg. 220.
Pellote. Lo mismo que polote.
Desde aquí
á la mi tienda non hay si non una pasada,
En pellote vos
iredes como por vuestra morada,
Todo es aquí un barrio e
vesindat poblada.
Arcipreste de Hita, Cant., copla 837.
Pelvi.
Del pers. * (* de tres puntos) pehleví, “urbanus, dialectus
urbis, dialectus urbana, lingua antigua Persarum” en Vullers.
Percal. Del pers. pergál o perguál “lacinia assuenda,”
o mejor del col. pargára, “genus panni s. vestis e bysso vel
bombyce crassioris similis panni generi, quod * dicitur; vestes”
en Vullers.
Peri. Especie de genio entre los orientales,
semejante a nuestras hadas. Del pers. peri, “ángel, espíritu
bueno, opuesto al * diu” en Vullers. Marcel Devic.
Perro
cast. y port. Según Marina, aunque con mal acuerdo, de dirú, “canis
venaticus.” La voz esp. no es ár. Díez no le da etimología;
pero la pone en relación con el b. lat. petrunculus canis. Donkin
pregunta si será de origen céltico, haciendo notar que en el
principado de Gales, perro es el nombre común de este animal. https://forum.saysomethingin.com/t/welsh-and-portuguese/15524/6
Petrera. Llaga, buba, úlcera. Del ár. betre, “scabies,
ulcera” en R. Martín, “botana, pústula” en Kaz., r.
bátara, “ulcerare” en el lexicógrafo catalán, “estar
cubierto de pústulas, pupas ú otras erupciones semejantes” en
Freytag. Cf. botor. De betre, transcrito el * por la p y añadida la
terminación cast. era, se hizo petrera. “Mataduras no, mas
petreras sí.” La Celestina, Acto I.
Piragua. Según
Marcel Devic, esta voz debe relacionarse con la malaya * práho
“batel.”
Pirbec port.
Del turco pír, “viejo, anciano, el superior de un orden” y
bec, “bey.” “O Pir Bec mandou no outro dia desembarcar
a sua artelharia de bater, etc.” Andrade, Chrón. d´El Rei D.
Joâo III, Part. IV, Cap. 93,
p. 108.
Pizca. La Acad., de acuerdo con Marina, trae esta voz
de la aráb. bitca, “pedazo cortado, parte arrancada que queda
en la mano, como un mechón de cabellos, un puñado de plumas.”
Díez y Donkin le dan un origen holandés-germánico (bißchen?).
V. Étym. Dict. in v. Pizza. Yo me inclino con Cabrera a que el
vocablo en cuestión, que se halla en el válaco bajo las
formas pitzigá, pizcá, es un n. sust. derivado del v. pizcar, que
viene a su vez del lat. vellicare, pellizcar. (pessigá,
pessigar, pessic)
Polote. Nombre entre los moriscos de
una suerte de saya de mujer hecha de chamelote, de paño florete,
palmilla o frisado, de grana, de escarlatín, de lana y contray, de
hilo, de lino, o de terciopelo, generalmente a dos colores con rasas
o franjas de seda, a veces recamada de oro. De pollóte, “saya
de mujer” en P. de Alcalá, o de bolót, “brial” en el
mismo lexicógrafo, voz derivada del cast. pellote, que, en sentir de
la Acad. trae su origen del lat. pellis. V. Dozy, Glos. in v.
Marlota. “Una saya de mujer que dicen polote de terciopelo
colorado, guarnecido con franjas de oro y aforrado.” Embargos de
bienes de moriscos, Arch. de la Alhambra. Sobre la forma de esta
vestidura, léese en Pedro Guerra de Lorca (Cathechesis mystag.,
etc., fol. 27): “Hae vestes ad suos rituales actus pertinent,
reliquae ad veneros; nam sago breviori, Pollote ab eis dicto, utantur
qui crura ipsa non tegit.”
Ponche. Del ingl. punch, del
pers. * (* de tres puntos) panch, zend. pañcan, sanscr. panchan, gr.
*, cinco, por hallarse compuesta esta bebida de cinco ingredientes, a
saber: té, azúcar, rom (ron, rhum), limón y canela. Marcel
Devic. Cf. el pers. * , de donde el ár. *, “electuario
compuesto de cinco cosas” en Vullers.
Porrón cast. y
gall., porró, porrona cat. Especie de vaso o vasija, piporro. De
borón, “urceus” en R. Martín. Pero como esta voz no se
encuentra en el ár. clásico, sospecho si será corrupción de la
lat. pirum, por razón de la forma de pera que tiene aquella
especie de jarro, cuya descripción puede verse en Labernia.
Pote
(bote) cast. y port., pot cat., prov. y val. Aunque en el ár.
clásico se encuentra la palabra batte, “urceus e corio
confectus, in quo liquidiora circunferunt viatores; urceolus ex corio
complicatilis, unde aquam bibunt” en Freytag, “especie de
pote o botella de cristal, sin. de dabba, en el dialecto de la Meca,
llamada así por su figura parecida a la de un pato; vasija o
frasco semejante a la *, suerte de vaso de forma esférica y cuello
corto” en Lane, la circunstancia de registrarse esta voz en el
nórdico, sueco, (danés) dinamarques y neerlandés
bajo las formas respectivas pottr, potta, potte, pot, y en el címbico
y gaélico bajo las de pot y poit, (inglés pott, como en teapot : tetera) me hace sospechar de su origen aráb. Yo me inclino a
que la voz en cuestión procede del lat. potus, que con la acepción
de urna, parece “haber sido usada por Plinio, según un
diccionario, y en el siglo VI por Venancio Fortunato, como sinónima
de canna y calix. Cf. albuce y bota.