El Parrisal de Beseit Parrizal de Beceite Matarranya Matarraña Teruel Aragón Spain
Escrito el por Javi Moragrega, #Quinsolfa
Ayer recordaba mi primera excursión al Parrizal, fue con mi abuelo, madre, padre con solo 5 años. Me acuerdo de ese paisaje, solo quería llegar a los Estrets, dos paredes de 60 metros de altura que cuando pasas entre ellas las puedes tocar con los brazos abiertos, cierro los ojos y oigo el ruido del agua, noto el aire, veo el color del agua, la vida enseña que solo te llevas estas vivencias…
En el transcurso de mi vida he subido muchas veces con familia, amigos, clientes, etc., enseñando este paisaje tan querido, siempre con la misma filosofía; respetándolo y disfrutándolo.
En estos últimos años y desde el 2012 hay un cambio en Parrissal, el inicio de una regulación y el inicio de la revolución digital, nos transformamos todos nos volvemos prescriptores, internet se vuelve un espacio democrático, todo se ve, todo se lee, todo se cambia sin mas.
Ayer en plena excursión me aleje del grupo para escuchar este paisaje y oír que me decía, que me preguntaba, quienes somos de donde venimos a donde vamos y que queremos.
Hace días que en los foros se habla sin parar, sin escuchar al paisaje, que es caro, que los de Beceite tienen bonos, que si es un coto privado, un largo etc.
Escucho debato y me doy cuenta que nadie piensa en ese paisaje, que unos y otros solo quieren beneficio económico sin escucharlo.
Los filósofos griegos decían; aquí nací, aquí quiero vivir, aquí quiero morir.
Este paisaje necesita mimo, regulación, protección, un presente un futuro igual que los habitantes de Beceite, comarca, provincia, autonomía, estado del Mundo,
Einstein decía en una frase “siempre hay que tener la mente abierta como un paracaídas”. Ese paisaje necesita eso trabajar por el, escucharlo, oírlo, comunicarse, cooperar y aliarse.
Es hora de luchar por un espacio natural protegido con humor, humildad y humanidad. No es propiedad de nadie, es de toda la humanidad.
Para ser feliz pasa por tener un entorno feliz, digno, respetado y protegido.