Ricart Garcia Moya.
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El sust. «orquestra» no existe en idioma valenciano, aunque el diario catalán Levante lo divulgue, igual que los académicos que viven de la catalanización. Quizá algún día les pida la ley cuentas por su colaboracionismo con el dinero de nuestros impuestos. (Levante, 26/ 06/ 2019). Per cert, este Alaponet li te una retirá al meu amic Alapont dels Escolapis, en el que sempre anava a la grenya en el recreu. ¿Será el seu fill o net?
La cotidiana agresión idiomática que padecemos los valencianos no tiene respuesta defensiva por parte de ninguna entidad con poder económico. No tenemos un sólo medio de comunicación con periodistas especializados, ni tampoco existe un partido político con gente capaz de argumentar y defender el idioma valenciano. En el caso del PP y Cs, siempre acobardados por el qué dirán, aprobaron la creación de la academia de catalán À Punt, y de los neófitos de VOX no vale la pena hablar.
No se trata de ofender a nadie, sino de exponer racionalmente las diferencias entre los tres idiomas, empezando por una premisa fundamental: castellano y catalán, por su origen, tienen considerable proporción de léxico compartido con el valenciano, o con mínimas diferencias morfológicas. Esta realidad ha provocado que la política expansionista catalana (entiéndase normalització) altere o falsee voces valencianas homógrafas con las castellanas e, impunemente, las catalanice. A diferencia de lo que sucedió en Cataluña desde el siglo XIX (con la ingente aportación económica de los negreros catalanes o sus herederos, que traficaban en Cuba y Puerto Rico con la ayuda del general Prim), aquí no hay alta burguesía ni empresarios que financien nada, aunque fuera una simple hoja dominical contra la extrema derecha de la dictadura catalanista.
Hoy leemos en el diario catalán Levante un texto en español con el sustantivo catalán “orquestra” mechado en él. Si tuviéramos un Jurat d’Agrávits1 , en lugar del carísmo e inútil florero Síndic de Greuges (copiado de Cataluña), informaría al pueblo sobre esta voz en nuestro idioma. Y los políticos que dicen defender nuestra lengua, se tomarían la molestia de consultar la documentación gratis y a disposición suya en el DHIVAM 2019. Hay que advertir que la voz no llegó con Jaime I, sino que aparece tardíamente en valenciano y castellano, por el 1700; y, en catalán, posteriormente:
orquesta –del grec-lletí orchestra. El sust. arcaic orquestra asoles aludix en valenciá al espay arquitectónic del antiu teatro grec: theatron, proskenion, orchaestra, balteus, frons scaenae, etc. En valenciá may equival a orquesta de músics, 1ª doc.: “pero en la nit les orquestes / de la música en tot art / divertíen el concurs, / que era entre els grans, el més gran” (Relació entre Tito y Sento… a honor de Carlos Tercer, 1784). En catalá també teníen orquesta, dasta que´ls nacionalistes de Fabra agarraren orquestra per 1915, pera alluntarse del vocable comú al valenciá, castellá y catalá.
orquesta “llums en tota la ciutat, / y, en los altars, orquestes” (Sento y Tito… lo feliz Part de Luisa de Parma, 1794)
orquesta “les orquestes, / les donçaynes y tabals” (Rahonament… que tingueren el Tio Cosme Nespla de Benifaraig, 1797)
orquesta “y els estudiants se portaren, / fentli música a la Reyna / … y atres nits a la desfeta / anaren al Real… / ab la estudiantina orquesta” (Memorial dels obsequis fets per Valencia, 1802)
orquesta “a tota orquesta” (BNM, Ms. 14339, Escalante: ¡Qué no será!, 1862, f. 1) El vocable heu trobem en lletres populars:
Y a mi Maria Ana.
Y yo la mijana.
Yo pese cent quintals.
Yo trenta en pese,
y aquell que no se hu crega,
que mos sospese.
Yo escomence, ¡donc, doonc!
Yo conteste, ¡dinc, dinc!.
La chicoteta canta
tin, tilín, tin…
Y cuan voltegem juntes
sonem com una música
de gran orquesta.
orquesta “bona orquesta” (G. Albán, M.: Un ball de convit, 1863, p.9)
orquesta “que fa ballar a un home / a tota orquesta” (Salvador, J.: Una agüela verda, 1876, p.26)
orquesta “l´orquesta está a cárrec de…” (El pare Mulet, 1877, p.31)
orquesta “cor a tota orquesta” (El Canari, volá 2, Castelló, 1883, p.14)
orquesta “pareix que a lo llunt sone una orquesta” (Marco Rivas, V.: La tasa dels hous, 1918, p.17)
orquesta “la meua pancha pareix una orquesta” (Visent Alfonso: ¡Mar adins!, 1924, p.11)
orquesta “els músics en orquesta” (Beut, P.: Cartelera d’espectáculs, 1932, p. 7)
orquesta de corda “si tots els veins hagueren pagat, botaríem una magnífica traca y la orquesta de corda…” (Llibret Foguera Alfonso el Sabio, Alacant, 1934)
orquestina “una orquestina que costa molts dinés” (Beltrán: Els ratolins, 1934, p. 4)
Ante este léxico y morfología valenciana, la descalificación más socorrida del catalanismo, —que finge poseer sabiduría casi divina— consiste en alegar que inventamos un idioma, o que es una maniobra política del fascismo. No merece la pena contestar a estos amorales, que actúan como auténticos nazis manipulando a la población desconcertada e indefensa; y no hay quien se oponga a esta agresión generalizada, pues tienen a su servicio instituciones y medios de comunicación. Y así seguirán otros cuatro años de subvención, champán y rosas. Mientras tanto, los políticos se esmerarán en tomarnos el pelo y, satisfechos, acomodarán sus traseros en millonarias poltronas.